Si pensamos en boda, a todos nos viene el recuerdo de celebraciones en los meses de mayo a septiembre, por aquello del buen tiempo y las horas de luz. Pero es verdad, que desde hace varios años, es cada vez más común que estos eventos tengan cabida en temporadas otoñales o incluso en invierno.
En esta ocasión, queremos hablar de las bodas en el mes de octubre. Un mes donde la vuelta al cole y al trabajo ya la tenemos olvidada. Y donde los días siguen teniendo buena temperatura pero sin ese calor agobiante.
Las opciones para el vestido y el traje de novio, también dan mucho juego. Piensa que puedes seguir combinando un escote en la espalda y a su vez elegir una pieza para abrigarte por la noche. Para los chicos, es momento de dar cabida a los tonos marrones y verdes más acordes con el período estival.
La luz, a medida que se va acercando el otoño, se torna también más bonita. Es tiempo de ocres, de atardeceres pausados, algo que beneficia a la hora de darle un plus a las fotografías.
Pero, ¿y si además te decimos que casarte en octubre trae consigo otras ventajas? Es una época donde los invitados, igual que los lugares de celebración (tanto iglesias como fincas), tienen más disponibilidad. Los precios de los proveedores también se abaratan al no tener tanta demanda.
Casarse fuera de temporada en Finca El Vivero te permitirá elegir entre:
10 % descuento en la mitad de los menús
Otra hora discoteca y barra libre
Recena en la última hora de la discoteca
Una hora de Coctelería en vivo durante el cóctel de bienvenida
Y tú, ¿te casarías en octubre?